CCOO reclama una ratio menor para el comedor de 2 años

CCOO denuncia que, de nuevo, la Consejería de Educación, Formación Profesional y Empleo ha hecho caso omiso de las enmiendas a la propuesta de modificación de la orden de comedores  que debía adecuarse para la entrada del alumnado de 2 años en los centros educativos el próximo curso.

Las enmiendas, presentadas en el Consejo Escolar de la Región de Murcia por CCOO, buscaban rebajar la ratio propuesta por la Consejería (12 niños de 2 años por profesional para el periodo de comedor) para que no superara la establecida para el aula (1 profesional para cada 10 infantes) dado que el periodo de comida requiere una enorme cantidad de atención para  garantizar que los menores de esa edad coman y aprendan hábitos.

Según la Federación de Enseñanza de CCOO, el Gobierno Regional ha menospreciado las razones aportadas sobre las repercusiones que sobre la salud de nuestros hijos e hijas tiene una alimentación adecuada y un ambiente favorable. El sindicato recuerda que es la comida principal del día durante buena parte del año y que se refieren a niños que no controlan esfínteres o no comen solos y deben ir iniciándose en esos hábitos de autonomía, en nuevos alimentos, etc., todo esto requiere dar todo el tiempo necesario y toda la atención que requieran, lo que resulta claramente imposible con ese número de niños por adulto, convirtiéndose en un momento de estrés y conflicto.

Por un lado para CCOO, el comedor, debe ser un espacio educativo y los menores deben tener un ambiente favorable para comer,  relacionarse y alimentarse adecuadamente. Con estas ratios en el servicio de comedor es imposible que los niñas y niños puedan adquirir unos hábitos de alimentación saludable, además de aprender a entablar una relación sosegada con la comida, entendiendo el tiempo del comedor como un mero trámite en el que es necesario engullir y terminar cuando antes para salir al patio o al aula a jugar.

Por otro lado, el sindicato no comprende para que sirven los trámites de audiencia pública si no se atienden ninguna de las aportaciones, aunque sean respaldadas por lo realizado en otras comunidades con estas edades. De lo que no cabe duda,  para CCOO, es que esta dotación de personal es totalmente insuficiente para dar una respuesta adecuada a la función esencial del aprendizaje de hábitos alimentarios y de las buenas prácticas en relación con la comida. Es una inversión que da sus frutos durante toda la vida en salud y en bienestar.