El PSOE de Molina de Segura denuncia el impago de anticipos de la ATRM y la carga de competencias impropias impuestas por la CARM

El PSOE de Molina de Segura denuncia el impago de anticipos de la ATRM y la carga de competencias impropias impuestas por la CARM
El Grupo Municipal Socialista en el Ayuntamiento de Molina de Segura ha denunciado públicamente el grave perjuicio económico que sufre el municipio debido, por un lado, al incumplimiento en el pago de anticipos por parte de la Agencia Tributaria de la Región de Murcia (ATRM) y, por otro, a la asunción de competencias que son responsabilidad del Gobierno Regional.
El convenio de colaboración tributaria entre la ATRM y el Ayuntamiento establece la obligación de la agencia regional de anticipar un porcentaje de la recaudación de impuestos clave como el IBI. Sin embargo, estos pagos vitales para la liquidez municipal no se están efectuando con la regularidad y cantidad debida.
«Es inaudito que la ATRM incumpla sistemáticamente un convenio que debe garantizar la financiación local», afirma Isabel Gadea, portavoz del Grupo Municipal Socialista. «Esta demora en los ingresos se asfixia a nuestro Ayuntamiento y limita nuestra capacidad de invertir en servicios esenciales para los ciudadanos».
Los socialistas añaden que este problema se suma a la carga financiera que supone para el Ayuntamiento tener que asumir competencias que, por ley, corresponden a la Comunidad Autónoma pero que no son debidamente financiadas. “Molina de Segura destina recursos propios a cubrir servicios que deben ser responsabilidad del Gobierno de López Miras”, señala Gadea. «Esto detrae fondos que podríamos usar en mejorar parques, calles o instalaciones municipales. Pagamos nosotros por lo que deberíamos pagarles. Hablamos de más de 9 millones de euros al año».
El PSOE recuerda la existencia de cláusulas en el convenio con la ATRM que permitirían su resolución ante incumplimientos graves. Además, critican la decisión del actual Alcalde de ceder la recaudación voluntaria del IBI a la ATRM, disolviendo la agencia tributaria municipal. «Fue un error que nos hace más vulnerables», apunta Gadea. «Ahora dependemos de una agencia regional que no cumple, después de haber liquidado la nuestra, que sí funcionaba para Molina».