PENSANDO EN VOZ ALTA : HASTA AQUÍ

PENSANDO EN VOZ ALTA
HASTA AQUÍ
Este año 2019, es el año del cerdo en el calendario chino. Me ha llamado la atención que el ‘cerdo’ es compatible y muy amigo del ‘conejo’, animal que corresponde con mi fecha de nacimiento. Si mezclamos algunas características de ambos animales nos encontramos que me identifico bastante con ellos, por ejemplo: «Su meta es vivir tranquilamente, sin altibajos de ninguna clase. Desinteresados, dedicados y cariñosos. Cuando inicia un trabajo no se detiene hasta verlo concluido. Su tenacidad en cualquier empresa resulta asombrosa. Se les califica de estudiantes natos y mejoran con la edad. Aborrecen las discusiones y las confrontaciones físicas. Se guían rigurosamente por las reglas…». Estarán ustedes de acuerdo o no con lo apuntado, fundamentalmente quienes estén más próximos a mí, pero yo me veo reflejado en esas cualidades del conejo y del cerdo.
Me imagino que a esta altura de la lectura se preguntarán que todo este preámbulo a que se debe, máxime cuando el título de esta columna es “Hasta aquí”. Voy a intentar conducirles a donde quiero llegar.
Mi meta es vivir tranquilamente… eso va a ser a partir de ahora. Sobre todo, en algunas cuestiones como las relacionadas con presentaciones de autores y sus obras o como mi labor frente a “De cañas con…”. He de confesarles que preparar cada una de mis intervenciones me sume en una desazón tremenda, estoy intranquilo hasta que se celebra… pues bien ‘hasta aquí’. A partir de ya, y como me rijo por las reglas, celebraré mi penúltimo “De cañas con…”, en Mister Witt Café, el próximo viernes, 25 de enero. Y mi penúltima presentación será el día 1 de febrero. Digo penúltima porque la última será cuando muera. ¿A qué se debe tal decisión? Muy sencillo… es patente que el “De cañas con…” no interesa a nadie. Al que celebré, último del año, en noviembre de 2018 acudieron cuatro personas, una de ellas mi mujer. Muy agradecidos a ellos. Pero es que prácticamente ese es el tono. ¿Lo hago mal? ¿Qué cambiarían ustedes? ¿Cómo lo quieren? ¿Realmente interesa? ¿Sí regaláramos los libros de los autores acudirían más? -por cierto, llenazo hasta la bandera en la presentación del libro sobre Nicomedes Gómez, el pasado viernes, 18. No quiero pensar que tal afluencia se debiera a que regalaban el libro-. Hago estas preguntas a instancia de una de mis hijas. Pero veo difícil el que me convenzan para seguir. Con las presentaciones ocurre lo mismo, las preguntas son similares. Si tienen ideas que consideren interesantes, por favor, díganmelo.
Ya saben que aborrezco las discusiones y las confrontaciones… por lo que no voy a entrar al trapo de ninguna. Como soy persona de principios, voy a trabajar para sacar adelante el “ELACT 2019” y la “V EDICIÓN DE CARTAGENA NEGRA”. Después hablaré con quien corresponda para ver el camino a seguir. Son muchos años trabajando por y para la cultura y la literatura en esta maravillosa ciudad, Cartagena, pero llega un momento (siempre lo he dicho) que las ideas se acaban, el cansancio -por muchas razones- te embarga y la ilusión se agota. Los más próximos a mí, mis colaboradores saben por donde van los tiros. Muchas veces es remar contracorriente y el físico ya no está a la altura conveniente. La cabeza bien, gracias.
Por supuesto que me seguirán encontrando en mis citas semanales: En “Cartagena Actualidad” con los “Rincones Literarios de Paco Marín”, sábados y domingos. Los lunes con esta columna “Pensando en voz alta”; también en “Murcia Actualidad”. Continuaré, así mismo, con mi colaboración en la revista digital “Agitadoras”. Seguiré asistiendo a presentaciones que celebren mis amigos; si soy invitado a algún debate, iré. Por supuesto, tanto en cuanto que la SER siga contando conmigo, los primeros lunes de mes me tendrán en la “Tertulia Literaria” con mi compañero, más que compañero, mi AMIGO Antonio Parra.
Muchos se preguntarán como he llegado a esta situación. Mucho hastío, mucho cansancio… ¿Culpa de quién? Por supuesto que mía, no habré hecho bien mis deberes. Lo curioso es que cada vez que anuncio un “De cañas con…”, por ejemplo, en el “feisbú” aparecen tropecientos mil me gustan y no se cuantos miles de personas van a asistir y después ni el tato. Evidentemente no interesa lo que hago. Por lo tanto, en este lunes azul,… “HASTA AQUÍ”.