Rincón Literario de Paco Marín: “Enfermos antiguos”
TÍTULO: Enfermos antiguos
AUTOR: Vicente Valero
EDITA: Periférica (2020)
Encuadernación: Rústica con solapas. Tamaño: 13,5 x 21 cm. Número de páginas: 144. PVP: 15,75 €. ISBN: 978-84-16291-97-7
Una de las maneras más impresionantes de recordar la niñez, y así lo he hecho, nos la presenta Vicente Valero en Enfermos antiguos. Me he visto reflejado en ese niño que acompaña a su madre a visitar enfermos. En estos recuerdos que me vienen he visionado a un tío mío –“practicante” de profesión- con sus útiles de cura y sus jeringuillas, algunas descomunales, para nosotros… con ellas nos sanaba de nuestros males, estacionales, menores: fiebres, resfriados, anginas…
Costumbre perdida, la de visitar a los enfermos en sus casas… ahora, como mucho, vamos a los centros hospitalarios… pero no es lo mismo, incluso se prohíbe la entrada, según las plantas, a los niños… de ahí Enfermos antiguos…
Una antigua costumbre social –la de visitar a los enfermos– se convierte, en esta nueva novela de Vicente Valero, en el pretexto único para la creación de un original y atractivo mosaico de historias y retratos. Como en Las transiciones (Periférica, 2016), el narrador vuelve a los años de la infancia y a su isla natal para indagar en el estado de una sociedad que está a punto de asistir a la muerte de Franco y al comienzo de la Transición con sensaciones encontradas, las propias de un viejo y anquilosado mundo que se derrumba y en el que sólo el turismo reciente parece haber empezado a ejercer un papel novedoso y modernizador.
Pero Enfermos antiguos, además de ser un retrato implacable de la sociedad de aquellos años, es sobre todo una novela sobre la infancia, con sus insólitos descubrimientos y efímeras certezas, que propician un jugoso y divertido anecdotario, y su persistente atmósfera familiar, la misma con la que el autor construyó Los extraños (Periférica, 2014): la historia, en fin, de un convulso aprendizaje en tiempos de cambios profundos y decisivos, en la que el lector podrá encontrar situaciones y personajes tan cercanos como inolvidables.
Vicente Valero presenta, además, una vivencia amplia en el comportamiento de las personas, tanto en la enfermedad como en la convalecencia. Cada persona es única en su enfermedad y en su recuperación.
Vicente Valero (Isla de Ibiza, 1963). Es uno de los principales poetas de su generación, autor de seis poemarios y Premio Loewe. En paralelo, publicó como prosista Viajeros contemporáneos (2004) y Diario de un acercamiento (2008), además de la correspondencia ibicenca de Walter Benjamin: Cartas de la época de Ibiza (2008). En 2014 apareció, ya con el sello de Periférica –como toda su obra narrativa a partir de entonces–, su primera y elogiadísima novela, Los extraños, a la que siguieron El arte de la fuga (2015) y Las transiciones (2016), primera de una serie de novelas cortas «de formación» de la que forma parte Enfermos antiguos. Su ensayo Experiencia y pobreza. Walter Benjamin en Ibiza, traducido ya a varias lenguas, fue recuperado por Periférica en 2017 en una edición corregida y ampliada. En 2018 publicó su última novela hasta ahora, Duelo de alfiles.
Gracias a Vicente Valero… por sus palabras…
P.- Por favor, recuerde a los lectores quien es Vicente Valero.
R.- Un lector y escritor ibicenco de 57 años.
P.- ¿Cuándo, cómo y por qué nace Enfermos antiguos?
R.- Quería abordar de nuevo el mundo de mi infancia (como ya hice en otro libro titulado Las transiciones) pero desde una perspectiva única –la de visitar a los enfermos-. Las enfermedades y las casas de los enfermos me permiten ofrecer una visión de la sociedad de los primeros años 70, una sociedad que ya se despedía de un mundo viejo y se aproximaba a uno nuevo, desconocido. Mi infancia transcurre en esa transición.
P.- ¿Existe una base documental o tira de recuerdos?
R.- No es en absoluto una crónica, sino una narración en la que no sólo mis recuerdos, sino los recuerdos familiares en general están presentes. Por lo tanto, la imaginación también lo está, pues nadie recuerda los mismos hechos de la misma manera, como es sabido. Y a menudo, para coser unos recuerdos con otros también es necesaria la ficción.
P.- Siguiendo con la anterior pregunta… ¿Forma parte de su autobiografía?
R.- No son unas ‘memorias’ al uso, pero todo transcurre sobre una base autobiográfica.
P.- Usted qué niñez/juventud prefiere ¿la de los tiempos pasados o la actual?
R.- En aquellos tiempos estas etapas de la vida se abrían y se cerraban abruptamente. Uno dejaba de ser niño casi de golpe y empezaba otra etapa nueva con otros retos nuevos. Ahora parece que esto no es exactamente así, porque veo constantemente niños de 30 y 40 años, y es algo que me aburre y disgusta.
P.- ¿Cuáles son sus géneros y autores favoritos?
R.- Mi lista de autores favoritos es muy larga y yo leo habitualmente cualquier género. Para la escritura de mis libros (tanto los de poemas como los narrativos) han sido decisivas mis lecturas de poesía, filosofía, teología y novela.
P.- ¿Qué está leyendo, ahora mismo?
R.- Los Diarios de Emerson.
P.- Como lector, prefiere ¿libro electrónico, papel o audio libro?
R.- Papel.
P.- ¿Qué manías tiene a la hora de escribir?
R.- Yo diría que ninguna.
P.- Relate alguna curiosidad literaria personal que le haya ocurrido y no ha desvelado hasta ahora.
R.- Quizás esta curiosidad responda también a la anterior pregunta. Cuando escribía Los extraños, mi primera obra narrativa, todas las mañanas, después de poner en marcha el ordenador y buscar la página donde tenía que seguir, escuchaba la primera suite para violoncello de Bach, aunque sólo su preludio. Era como si aquella música me dispusiera para escribir aquellas historias. De todas formas, nada parecido me ha vuelto a ocurrir con los otros libros.
P.- Venda su libro ¿por qué hay que leer Enfermos antiguos?
R.- Creo que es un libro que trata sobre la infancia de todos, porque la enfermedad, los enfermos, los médicos y las medicinas son para los niños misterios sobre los que no dejan de pensar nunca y sobre los que encontrar una respuesta satisfactoria o tranquilizadora resulta difícil.
P.- Sus planes a corto y medio plazo ¿son?
R.- Sobrevivir a la pandemia.